«Barcelona entiende mejor el concepto de coworking», asegura Rafa de Ramón, CEO de Utopicus. A diferencia de otras grandes ciudades europeas, Barcelona es más abierta al coworking, a las oficinas compartidas y a la vida profesional en comunidad. Se estima que en 2020 –¡el año que viene!– existirán en todo el mundo más de 26.000 espacios de coworking, cifra que aparte de dar miedo, pone de manifiesto que el coworking ya no es una tendencia, sino una realidad. Y en casa jugamos con ventaja.

En nuestra ciudad se respira coworking. Puede que sea porque nos encanta tanto comunicarnos que hemos apostado muy fuerte por espacios que diesen la oportunidad de poder compartir un café, una anécdota, una comida o un simple desayuno con compañeros de trabajo. O puede que sea porque no soportamos quedarnos en casa, ni que sea para trabajar. Somos inquietos, ambiciosos y sociales, tres ingredientes que piden a gritos: ¡coworking, por favor!

En definitiva, Barcelona lleva el coworking en la sangre, y no desde hace dos días. En Meet BCN llevamos más de siete años viendo como el coworking puede ser decisivo para una empresa y, a la vez, hacer que sus integrantes vayan felices al trabajo. El coworking es compartir, es ayudar, es crecer, es aprender, es conectar, es crear, es imaginar, es amistad.

Existen muchos espacios de coworking y cada uno tiene características que lo hacen único, pero todos tienen en común un mismo objetivo: que no te quedes en casa. Por esto hay espacios para todos los gustos: unos son enormes, con muchísima capacidad, para albergar el máximo de freelances posible, mientras que otros se caracterizan por sus pequeñas dimensiones. Los espacios más reducidos pueden aportar ventajas que no encontrarás en los más grandes: mayor sentimiento de comunidad, trato familiar y de proximidad con los gestores del espacio, mayor intimidad y tranquilidad, imagen de empresa propia para los clientes, espacio más acogedor, entre muchas otras.

Como somos animales y necesitamos sentirnos parte de una comunidad es tan relevante el concepto de coworking. Como todos tenemos algún punto más débil nos necesitamos: por esto debemos tener en cuenta la riqueza de la diversidad de las personas dentro de un grupo. En Barcelona lo entendemos a la perfección, motivo por el cual triunfa aquí el coworking. Aunque sean más los espacios de trabajo compartido en Madrid, por ejemplo, más provechoso es en Barcelona ser un coworker. ¿Aún estás dudando de si pasarte a una oficina compartida? ¡Ven a vernos y tus propios ojos decidirán por ti!